Hablemos sobre el amor, ¿qué es verdaderamente amar al otro? ¿Qué implica amar a alguien más? ¿Qué no es amar?. Estamos seguros de que con frecuencia estas preguntas llegan a tu cabeza, y sabemos que las respuestas nunca son claras. Lo primero que debes saber es que el amor es un sentimiento que está ligado a las emociones, y, por lo tanto, a veces te es muy difícil de controlar.
Lo primero que debes tener en cuenta, es que el amor es un motivador para tu vida y una fuente de inspiración que te impulsa a alcanzar algunos de tus sueños. Estamos convencidos de que uno de los propósitos que de seguro tienes en tu vida, es amar y ser amado, sin embargo, también es bien sabido que este sentimiento causa sufrimiento cuando no es correspondido.
Como consecuencia de lo anterior, con el tiempo han surgido películas, series, canciones, libros e incluso charlas que tratan de ilustrar un poco lo que es el amor, y que, de una u otra forma, idealizan el concepto y hacen que te crees una idea de amor romántico que en muchas ocasiones se aleja de la realidad.
Definir el amor es sumamente complicado, pues existen diferentes tipos de amor según la intensidad(es decir, dependiendo de a quién amas y el momento de tu vida en el que lo haces.). Lo cierto es que esta definición se convierte en una ardua tarea debido a que, como te lo mencionamos anteriormente, el amor está socialmente influenciado y hay muchas opiniones y maneras de enfocarlo, sentirlo y exteriorizarlo.
Dejando de lado otras formas de amar (como pueden ser el amor de madre), en este artículo nos centraremos en qué es el amor verdadero y qué no lo es, siempre desde el concepto de amor romántico, que quiere decir el concepto de amor que te han transmitido de generación en generación.
¿Qué dice la psicología sobre el amor?
Así como la felicidad, la tristeza, el dolor y la euforia han sido materia de investigación desde la psicología y otras áreas, el amor también ha sido investigado y por eso es importante hablar sobre él en un capítulo aparte dentro de este artículo. Lo primero que debes saber, es que gracias a estos estudios, nos ha sido posible a los terapeutas y psicoterapeutas establecer la relación entre el cerebro, el amor y el enamoramiento.
Algunos de los puntos que vale la pena mencionar en este grupo de hallazgos, son:
- Puede afirmarse que las relaciones de amor y el enamoramiento ayudan a que te mantengas vivo, porque siempre ves en tu entorno un motivo para vivir y disfrutar de cada día.
- El amor funciona en tu cerebro como una droga, enamorarte hace que tengas comportamientos de euforia y éxtasis.
- El amor se alimenta de expectativas que vas creándote a lo largo de tu vida, te hace mantener la ilusión de conocer a alguien que llene esas expectativas.
- Cuando estás enamorado, liberas grandes cantidades de serotonina que hacen que tu estado de ánimo mejore, pero también, hace que puedas llegar a tener comportamientos obsesivos cuando recuerdas a tu pareja.
Adicional a todos los puntos anteriores, cuando el amor está presente en tu vida (especialmente si es amor de pareja), liberas una serie de neuroquímicos como la adrenalina, que te hacen estar más enérgico; o también liberas dopamina en grandes dosis, que interviene a la hora de reforzar conductas placenteras, es decir, que hace que te sientas excesivamente feliz.
Esta cascada neuroquímica, que puede hacerte sentir pleno y eufórico cuando estás enamorado, también causa serios problemas cuando sufres un desamor, pues puedes deprimirte y obsesionarte con esa persona que tanto has amado, llegando a tener comportamientos que te impidan mantener el balance y el equilibrio en tu vida, generando uno que otro pensamiento de tristeza y de dolor
¿Qué datos curiosos sobre el amor debes tener presentes en tu vida?
En las últimas décadas, los estudios sobre el amor y el enamoramiento han sido muchos, y algunos de los resultados o conclusiones a las que se ha llegado pueden sorprenderte, y por esta razón, te los compartimos a continuación:
- Los pequeños detalles son realmente importantes, pues hacen que tu pareja sienta tu interés hacia ella y permite mantener vivo el amor y la capacidad de demostrarse cariño por medio de aspectos cotidianos que a pesar del tiempo no desaparecen sino que se transforma.
- Algunos estudios han demostrado que las películas de amor son excelentes para replantear tu relación de pareja, te ayudan a detectar comportamientos y actitudes que deben estar presentes en tu relación o que deben desaparecer de la misma porque solo producen grietas.
- Las redes sociales son la primera causa de divorcio. Al menos es lo que concluyen los datos de una encuesta realizada por la Academia de Abogados Matrimoniales de Estados Unidos. Lo cual no significa que no puedan relacionarse con otra persona, sino siempre hacerlo respetando según los acuerdos establecidos con tu pareja.
- Las relaciones a distancia sí funcionan, requieren de un esfuerzo extra por parte de ambos miembros, de mucha comunicación y confianza, pero por supuesto que pueden resultar exitosas, duraderas y estables.
- El amor engorda (sí, sabemos que lo habías tenido en duda), y esto se debe a que los planes entre los dos son mucho más tranquilos y generalmente, vienen con comida a bordo.
Ahora que de seguro te hemos sacado una sonrisa, es momento de hablar de esas cualidades que son fundamentales en cualquier relación de pareja y que reflejan el amor que se tienen mutuamente y que los hace mantenerse juntos. Así que lee con atención:
- Intimidad: Podríamos definirla como la conexión emocional que existe entre tú y tu pareja, a esto se le suman aspectos como el afecto, la comunicación y la confianza que hacen que haya entre las partes un toque de camaradería que les permite mantenerse juntos y conocerse mutuamente.
- Pasión: Aquí nos referimos concretamente a la atracción física, a las relaciones sexuales, a la energía y excitación entre ambos, a la necesidad de estar en contacto con el otro y de disfrutarse completa y mutuamente.
- Compromiso: Cuando tienes pareja o tomas la decisión de compartir tu vida con alguien más, lo haces porque hay amor de por medio, un amor que los hace mantenerse juntos y luchar por los intereses comunes que de seguro, los llevarán rumbo a la felicidad. El compromiso incluye lealtad y un sentimiento de protección que les permitirá siempre preocuparse por el bienestar del otro.
Estas cualidades se combinan y permiten la construcción de diferentes tipos de relación. Una relación completa, donde hay amor duradero y feliz, es aquella que está compuesta por las 3 características anteriores, sin embargo, existen otros tipos de relación (y por ende de amor) sobre los cuales vale la pena hablar. Así que lee con atención, porque en esta parte nos saldremos un poco del concepto de amor de pareja, para hablar de otros tipos de amor que puedes experimentar:
- Cariño: Hace referencia a la amistad auténtica entre dos personas, aquí encuentras intimidad porque compartes tu vida y por ende tu tiempo, tus secretos y tu forma de ver la vida con alguien más, pero no hay pasión ni compromiso. Es una relación de amor que se da desde el corazón, desde la conexión entre dos personas.
- Encaprichamiento: Se enfoca principalmente en las relaciones superficiales, el único vínculo que existe es la pasión, pero no hay nada más que quieran compartirse o contarse. No existe comunicación, confianza o sentimientos profundos.
- Amor vacío: Hay compromiso, sabes que quieres (o a veces te sientes en la obligación) de permanecer al lado de alguien solo por las cosas que tienen en común o por la promesa de permanecer juntos. No hay amor, solamente compromiso.
- Amor romántico: Existe pasión e intimidad entre las partes que hacen que los dos sientan gran atracción; sin embargo, no hay compromiso, no existe deseo de permanecer juntos y superar juntos adversidades y miedos que les permita mantener y fortalecer su relación en el tiempo.
- Amor sociable: Es la mezcla entre intimidad y compromiso, sin embargo, se ha perdido toda la pasión. Este tipo de relación surge, más que todo, cuando ya no hay química entre las parejas y únicamente se limitan a compartir el espacio y la vida.
- Amor Fatuo: No hay intimidad, no se comparten sus secretos, miedos e inseguridades, no existe complicidad, únicamente sienten atracción el uno por el otro, quieren estar juntos, sin embargo, no tienen muchas cosas en común, las emociones presentes en su relación únicamente se activan durante los encuentros sexuales.
- Amor consumado: Este es, quizás, el amor más intenso, porque combina los 3 elementos nombrados anteriormente y hace que entre las partes de la relación haya todo lo que se necesita para ser feliz.
Hay dos cosas que vale la pena aclarar, la primera, es que no existe una relación completamente perfecta, las discusiones, los desacuerdos y las inconformidades, siempre van a aparecer, el secreto está en escucharse para evitar que el otro sienta vacíos que lo hagan querer marcharse. Nuevamente, la comunicación, la confianza, las ganas de solucionar conflictos y los sentimientos de amor son los que permiten que puedan llegar a acuerdos que les generen tranquilidad y equilibrio.
La segunda, es que el amor se transforma, el amor es la capacidad de ver al otro tal cual es, con defectos y virtudes que lo hacen imperfecto, pero con la plena convicción de querer pasar tu vida a su lado y de sortear juntos los obstáculos que puedan presentarse.
Pero entonces, ¿qué no es el amor?
Un concepto se ha popularizado en los últimos años, y que creemos, ha sido gracias al auge de las redes sociales, es el “amor tóxico”. Este se caracteriza por una serie de conductas de dependencia emocional o de control que convierten la relación de pareja en una relación completamente dañina, pues impide el libre desarrollo individual y genera una situación de codependencia y celos excesivos.
Este concepto de amor tóxico, podría nombrarse como lo que no es el amor, porque son conductas contrarias de lo que implica amar a otra persona. En una relación de este tiempo se ve la carencia de aspectos como:
- Libertad.
- Privacidad.
- Confianza.
- Compromiso.
- Autoestima.
- Respeto.
- Cuidado mutuo
Todos los anteriores son factores fundamentales en una relación de pareja y más en una relación donde se considera, hay amor verdadero y duradero entre ambos miembros. La no presencia de ellos genera conflicto al interior de la relación, hace que se debilite y que, poco a poco, todo tienda a desaparecer. De seguro, ahora quieres saber cuáles son esos comportamientos o características del amor tóxico, así que presta atención:
- Dependencia emocional: Uno de los miembros tiene una baja autoestima y depende de la compañía del otro porque teme profundamente a lidiar con sus propios miedos y traumas. No tiene que ver con el tiempo, relaciones de meses pueden presentar dependencia emocional.
- Codependencia emocional: Pones el bienestar del otro por encima de la tuya, se convierte en una adicción saber qué necesita tu pareja y cómo puedes ayudarlo a que esté mejor.
- Vida social limitada: Los miembros de la pareja dejan de lado sus amistades y viven única y exclusivamente por y para su pareja. No hay posibilidad de ampliar el círculo social ni de crecer a nivel social, porque la construcción de relaciones interpersonales es vista como un agravio hacia el otro.
- Obsesión por la relación: La inseguridad de alguno de los miembros hace que se obsesione en exceso por la relación, siempre tiene temor a perder al otro o a defraudarlo y hace cosas inimaginables por mantenerlo a su lado.
- Poco realista: Este amor vive las expectativas, cree que todo es perfecto, que nunca habrá problemas, lo cual hace que tenga choques fuertes, frecuentes y a veces desproporcionados frente a la realidad, porque una relación (cualquiera que sea) pasa por conflictos que ponen a prueba los sentimientos, pero solo mediante la comunicación y la confianza se podrá dar una solución efectiva
- Necesidad de aprobación: Una de las partes busca en la pareja seguridad, estabilidad y comodidad, pues cree que estas características no se las puede dar por sí solo, piensa que necesita del otro para poder decidir sin miedo ni temor.
- Posesivo y controlador: Este tipo de amor no es un amor libre, sino que alguno de los miembros de la pareja interpreta que la otra persona es su posesión y puede decidir sobre su vida como quiera, sin importarle ni darle valor a su opinión.
- Celoso: Los celos y los intentos de control forman parte de la día a día de la pareja. Lo cual les causa infinita infelicidad, pues una de las partes, siempre va a sentirse en una jaula de la que piensa no podrá salir.
- Manipulador: Existe chantaje emocional por parte de alguno de los dos. Con frecuencia se escuchan frases como “si te vas me muero” o “si no eres mío o mía no serás de nadie más”, lo cual deposita en el otro la gran responsabilidad de velar por la vida de su pareja, pasando por encima de sus propios sentimientos
- Mala comunicación: La comunicación no es fluida ni constante y, por tanto, la relación no sana ni da la posibilidad de conocerse mutuamente. La confianza se ha perdido, siempre hay miedo de hablar con la verdad porque desconoces la forma en la que el otro va a reaccionar.
- Conflictos excesivos: Los puntos anteriores causan que la relación se convierta en una relación tóxica, pues ninguna de las partes es feliz y hay discusiones todo el tiempo donde cada vez el amor va desgastándose y desapareciendo.
Como puedes darte cuenta, el amor real, el amor auténtico está libre de ataduras y lleno de confianza, una vez entiendes qué es el amor y defines que es un sentimiento que existe para compartir con otro y para formar parejas, familias u hogares felices, empiezas a evitar comportamientos que hagan tóxica tu relación.
Como recomendación final, es importante que sepas que si algo no está funcionando como debería en tu relación y los problemas cada vez son más difíciles de sobrellevar, aún habiendo amor de por medio, no dudes en consultar con un psicoterapeuta, de seguro en medio de la terapia encontrarás las respuestas que necesitas para que en realidad haya disfrute en tu relación y en tu forma de amar al otro.
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Ten siempre presente que buscar ayuda de alguien más no es retroceder, sino avanzar para lograr tener el bienestar que buscas en tu vida y en tu relación.